
Llevamos a estas alturas bastante camino del 2009, se acerca el año nuevo y con él todo tipo de propósitos y expectativas. En estas fechas en las que nos reunimos con la familia hacemos balance de todo lo que nos ha ocurrido, confiados y esperanzados, imaginamos que los nuevos doce meses nos traigan todo lo que les pedimos. Los que han disfrutado de un maravillosos y pleno 2009 piden que para el siguiente se mantenga todo igual o incluso mejor, se hace una visualización de dónde o como estaremos dentro de x tiempo. Por otro lado están los que escaldados, esperan las doce campanadas para sacudirse las pulgas, "el año que viene todo mejorará". Es un bonito ritual el despedir el año haciendo un buen balance y trabajando unos propósitos saludables para el que viene.
Por tradición, más bien por necesidad de la condición humana necesitamos rituales para todos los actos importantes de la vida, cuando damos la bienvenida a un recién nacido al mundo, le traemos regalos un "mira lo que te ofrece este mundo" miles de mensajes al móvil de los padres recordándoles que han tenido un niñ@ precioso les ayudan en ese cambio de rol. Al igual que cuando la abuela tierna y núcleo del clan deja de pertenecer al mundo de los vivos, una lista de trámites burocráticos en los que la palabra "defunción " aparece impresa en cada esquina, ropa y objetos personales que guardar, a los que hay que darles una nueva ubicación en un cajón de los recuerdos y en nuestro corazón. Y así, de esa misma manera y a distinto nivel usamos algún tipo de ritual para despedir el año y saludar al otro. Con alegría y nostalgia.
Perooo ¿porqué esperar a ese 1 de enero? ¿porqué no hoy día 15 de diciembre porqué no cualquier día del año en el que veamos que veamos que necesitamos un baño emocional? porqué no crearnos un ritual de limpieza espiritual cada vez que nos sintamos manchados por una discusión con un compañero de trabajo, una semana agotadora que parece no va a acabar nunca. Una ruptura de pareja o el comienzo de un nuevo curso del Inem.
Cada día sale el sol, nosotros decidimos si amanecerá mañana o si por el contrario esperamos al 31 de diciembre.
Felices fiestas y feliz año a tod@s
Poca gente sabe valorar la vida como una persona que expresa lo que acabo de leer. Esa persona es ejemplo de fuerza, vitalidad, y sobre todo esperanza, y a esa clase de personas, la vida les dará un regalo grande, hermoso y rebosante de felicidad...estoy plenamente convencida que en diciembre, abril, o agosto, da igual cuando sea, y de qué manera se manifieste, sólo sé que llegará.... y a no debería hacer falta hacer balance, puesto que sin darnos cuenta lo hacemos a diario
ResponderEliminarNiña me sacas los colores! no se ni que decirte...que aunque estemos lejos ya sabes que te quiero un montón!! Un abrazo prima!
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ResponderEliminarDespues de este lavado de cerebro,perdoname por este intento de boicotear tu blog...no lo voy a hacer nunca mas.Gracias por decir cosas bonitas,eres un solete.
ResponderEliminar:) jejeje luego pienso un comentario bonito y te lo pongo
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